Pocas veces, por no decir ninguna, habréis visto en este blog tacos como el que dan título a esta crónica. Hay otros títulos posibles para resumir la jornada de hoy en el Benito Pérez Armas, y también otras palabras que se podrían emplear para describir mi estado de ánimo, sin embargo ninguna expresión que se me ocurra (tampoco soy miembro de la Real Academia de la Lengua, y mi vocabulario es limitado...) se ajusta mejor a lo que siento ahora que me han bajado las revoluciones después de los partidos vividos esta mañana. ¡Estoy jodido!
Me explico: jodido porque tuvimos a tiro la victoria con el líder del grupo y perdimos, jodido porque no sumé ni un punto, jodido porque el míster no me dejó jugar el dobles, y sobre todo jodido porque tengo un pinzamiento en el hombro que me lleva amargando toda la tarde, y encima me lo tengo merecido por irme al bar con los compañeros en vez de quedarme a hacer estiramientos, que ya no tengo edad para andar haciendo el crápula...
Y a pesar de esto contento, muy contento. ¿Por qué? Pues porque hemos vivido una gran jornada de pingpong en nuestra cancha en la que hasta el público ha sudado de la emoción, y eso es lo que hace grande nuestro deporte. Ahí va la crónica de una jornada que ha tenido de todo.
En las alturas
Los compañeros de segunda tuvieron que madrugar para recibir al Hermigua en su visita a nuestra cancha, ya que el partido se adelantó a las 10:00. Cuando yo aparecí por allí, aún con el café bajando por el gaznate, arrancaba el partido entre Jesús y Francisco Piñero con la primera sorpresa del día. El joven gomero se imponía con claridad a nuestro compañero, que conociéndole estará pasando la tarde como reza el título (pero sin la segunda parte) ya que terminó la mañana con otra derrota frente a Guilios Demichelis.
El nuevo fichaje italiano del Hermigua se está convirtiendo en uno de los "cocos" de la categoría y sigue sumando los puntos de dos en dos, como los petit suis, y en un partido que no vi pero que debió ser de infarto, ganó también a Nano por 3-2 y a ventajas. Yo solo vi un par de puntos del partido, largos hasta decir basta, con muchos efectos raros y mucho miedo a entrar por parte del jugador del Dédalos. Menos mal que estuvo más atinado en su segundo enfrentamiento y se impuso a Iván Cruz, aunque el gomero forzó el 5º set y metió el miedo en el cuerpo a los nuestros, o al menos esa era la sensación que se transmitía por "radio macuto", a través de los compañeros que subían y bajaban a ver los partidos en las dos canchas en las que se estaba compitiendo.
Borja, una vez más, cumplió con su parte y sumó sus dos puntos frente a Fran e Iván (que al final se fue de vacío) y participó en el dobles que nos dio la victoria junto a Nano.
Estaba yo avisando desde hace unos días de que el Hermigua venía con ganas, al final nos ha dado un buen susto y por poco no nos da un disgusto. Tan reñido como el resto de los encuentros, el dobles transcurrió con los dos equipos peleando cada punto en otros 5 set agonizantes, esta vez con final feliz que permite a los nuestros mantener, una semana más, su posición privilegiada en la clasificación manteniendo sus opciones de ascenso.
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